Empresas extranjeras se preguntan: ¿Quién manda en PDVSA? ¿El Aissami o Quevedo?

La creación de la Comisión Presidencial para la Defensa, Reestructuración y Reorganización de la Industria Petrolera el pasado 18 de febrero, encabezada por el vicepresidente para el área económica, Tareck El Aissami, ha generado dudas entre representantes de empresas extranjeras debido a quién tiene el control sobre Petróleos de Venezuela (PDVSA) y ha agravado la parálisis en la corporación.
El mayor general Manuel Quevedo permanece en el doble cargo de ministro de Petróleo y presidente de PDVSA y representó a Venezuela en la reciente reunión ministerial extraordinaria de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), pero se le han limitado las funciones referidas a contrataciones y los reportes de producción, refinación, comercio y suministro deben pasar primero por la comisión que preside El Aissami, según indicó una fuente de la empresa.
Por otro lado, representantes de empresas extranjeras socias de de PDVSA en Venezuela desconocen a quién deben dirigir una comunicación o solicitar una reunión, lo que agrava la inseguridad jurídica y la falta de decisiones que forman parte del listado de causas que han propiciado una caída de la producción petrolera por debajo de 1 millón de barriles diarios en los últimos tres años.
“¿Debemos enviarle la carta al vicepresidente El Aissami, al general Quevedo o ambos? Se nombra una comisión y eso lo que hace es mantener las indefiniciones que hemos visto en los últimos años en la industria petrolera de Venezuela”, comenta el representanta de una empresa foránea. “En el gobierno del presidente Nicolás Maduro lo que hemos visto son más obstáculos por los constantes cambios en la presidencia de PDVSA”, acota.
Al inicio de su gestión en 2013, el presidente Maduro optó por ratificar a Rafael Ramírez como ministro de Petróleo y presidente de PDVSA, luego en 2014 designó en esos dos cargos a Eulogio Del Pino, quien hasta ese momento fue vicepresidente de Exploración y Producción de la estatal.  En 2017, el primer mandatario le dio la titularidad del ministerio a Nelson Martínez, quien venía de presidir la filial Citgo en Estados Unidos y a los pocos meses optó por un enroque de posiciones entre Del Pino y Martínez.
A fines de noviembre de 2017, la Fiscalía ordenó la detención de Del Pino y Martínez, junto a otros gerentes de PDVSA, por presuntas irregularidades entre las que se incluyó falsear o “maquillar” las cifras de producción. En ese momento se optó por la designación del mayor Quevedo, nuevamente en el doble cargo de ministro y presidente de la estatal, incluso durante parte de 2018 y 2019 gozó de un decreto especial que le permitió recurrir a la adjudicación directa para realizar las contrataciones.
Quevedo en su gestión llegó a solicitar ayuda celestial al propiciar una misa oficiada por el sacerdote Pablo Urquiaga, párroco de la iglesia La Resurrección del Señor, ubicada en Caricuao, para pedirle a Dios aumentar la producción petrolera.