Mérida intenta ser el primer ejemplo público de energía solar en Venezuela tras fracaso de proyecto en Los Roques

La administración de Nicolás Maduro, a través del Ministerio de Energía Eléctrica, Corpoelec y el Consejo Federal de Gobierno, optaron por financiar un parque de energía solar en el estado Mérida y apoyaron la iniciativa del gobernador de esa entidad, Jehyson Guzmán, de instalar celdas fotovoltaicas en el sector conocido como Llano de El Anís en el municipio Sucre de esa región.
Este proyecto se convierte en el primer financiado por el sector público que entra en funcionamiento tras el fracaso que supuso hace 7 años los paneles que se instalaron en la isla del Gran Roque del archipiélago de Los Roques.
“Estos paneles solares darán electricidad las 24 horas del día y está interconectado con el sistema eléctrico nacional”, dijo el mandatario regional. “Este proyecto, que es el primero de energías renovables de Mérida y de Venezuela, se orienta  en los principios de conservación de la naturaleza y preservar la vida humana en el planeta”, agregó.
El sistema instalado en Mérida cuenta con 135 paneles solares para beneficiar a más de 2.500 personas, ofrecerá servicio eléctrico al ambulatorio rural, cubrirá el alumbrado público y en su fase de arranque llega a 40% de su capacidad.
Este proyecto de Mérida, no obstante, no es el primero de energías renovables ni de energía solar que se impulsa desde el Gobierno. Petróleos de Venezuela (PDVSA) avanzó con la instalación de aerogeneradores para impulsar la energía eólica en la península de Paraguaná; y específicamente en energía solar, el Ejecutivo nacional adquirió celdas fotovoltaicas a la empresa china Yingli para que en el archipiélago de Los Roques se instalara lo que se concibió como “el proyecto solar más grande de Venezuela” capaz de generar 1.400 megavatios-hora para beneficiar a 400 hogares en la isla del Gran Roque.
El proyecto fue desarrollado por el Consorcio Energías Limpias Alternativas Venezolanas (CELAV), con el apoyo logístico y operativo para la adquisición de equipos de la española Vico Export Solar Energy. Los paneles se instalaron pero fallas en la calidad de las celdas impidió la operatividad y al final el suministro eléctrico se genera de plantas térmicas que operan con diesel que semanalmente es enviado por Petróleos de Venezuela.