Citgo recortó drásticamente sus compras de crudo colombiano en 2021 al reducirlas en 53%

La imposición de sanciones al sector petrolero venezolano por parte del gobierno de los Estados Unidos en enero de 2019 hizo pensar en Colomba que ese mercado en buena parte podría reemplazar el crudo Merey por el Castilla. Esa era uno de los deseos e intenciones del gobierno de Iván Duque, de la empresa estatal Ecopetrol y también de transnacioales que están en ese país.
La compañía de refinanción Citgo, filial de Petróleos de Venezuela (PDVSA) en Estados Unidos, ayudó en buena parte con esa estrategia porque en 2019 los despachos de crudo colombiano aumentaron en 236% para alcanzar la cifra de 52.132 barries por día, volumen que representó ese año 14% de las exportaciones petroleras colombianas hacia el mercado estadounidense.
La junta directiva de Citgo -nombrada por la Asamblea Nacional electa en 2015 – concentró su estrategia comercial en un equilibrio entre compras domésticas de crudo en Estados Unidos e importaciones básicamente de Colombia y ese esquema se mantuvo en 2020 cuando los despachos crecieron 5,6% para alcanzar el máximo de 55.082 barriles por día, pero ya en ese año se dio un colapso en la demanda y la situación interna del sector de los hidrocarburos colombianos frenó  el avance registrado en 2019.
Los actos de violencia de grupos irregulares -entre ellos la guerrilla del Ejercito de Liberación Nacional (ELN)-  las protestas de trabajadores de esta actividad y la acción de grupos ambientalistas han puesto freno al crecimiento de la producción en Colombia y como consecuencias de las exportaciones.
A lo anterior se agrega las dudas que han surgido entre los inversionistas las propuestas anti actividad petrolera del dirigente político Gustavo Petro, quien se perfila como el próximo presidente de Colombia en los comicios previstos para mayo de este año.
Es así como la junta directiva de Citgo durante 2021 recortó en más de la mitad (53)% las compras de crudo colombiano al bajarlas a un promedio de 26.051 barriles por día y ha optado más bien en privilegiar el crudo estadounidense.
Las exportaciones petroleras de Colombia hacia Estados Unidos registran una caída de 39% entre 2018 y 2021. Crecieron a 373.000 barriles diarios en 2019 pero ya en 2021 estaban en 203.000 barriles por día, un volumen inferior al que tenían en 2018. No obstante, durante esos tres años, que se corresponden al período de vigencia de las sanciones comerciales de Estados Unidos contra Venezuela, logró al menos estar como quinto suplidor petrolero de ese mercado norteamericano, superada por Canadá, México, Rusia y Arabia Saudita.