Sergio Díaz-Granados quiere que la CAF sea “el banco verde” de América Latina

El abogado colombiano Sergio Díaz-Granados asumió este 1º de septiembre la presidencia de la Corporación Andina de Fomento, conocido ahora como CAF Banco de Desarrollo de América Latina con el reto de convertir a esa institución en “el banco verde de América Latina” con el fin que se focalice en financiar proyectos ambientales, forestales, agua, climáticos, gestión de residuos, eficiencia energética y agricultura sostenible.
“En la CAF vamos a tener que revisar cada vez más que nuestros proyectos cumplan y tenga un impacto en lo económico, social y ambiental; y vamos a tener que demostrar cómo este financiamiento tiene un impacto directo en la reducción de la pobreza y en el aumento en la equidad de género”, ha señalado Díaz-Granados. “Si se quiere realmente alentar a las economías de América Latina hay que hacerlo con empleo y comercio entre nosotros, entre todos. Esa es la mejor política que se puede desarrollar”, agregó.
La CAF informó que otro eje estratégico del funcionario será profundizar el apoyo al sector privado para incrementar la productividad y la generación de empleo junto a políticas transversales de equidad de género, inclusión y diversidad. Adicionalmente, se fomentarán los proyectos de integración, especialmente de comercio transfronterizo, corredores logísticos, proyectos de eficiencia energética y agenda digital. 
Sergio Díaz-Granados es abogado y especialista en gobierno y finanzas de la Universidad Externado de Colombia, con estudios de posgrado en Gerencia Pública para el Desarrollo Social realizados en INAP (España). Realizó estudios superiores en Derecho Constitucional, impartidos por la Universidad de Salamanca (España). Fue ministro de Comercio, Industria y Turismo de Colombia, viceministro de Desarrollo Empresarial y presidente de las Juntas Directivas de Bancoldex y PROCOLOMBIA.
El acto de toma de posesión de Díaz-Granados se contó con la presencia de la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, quien manifestó su expectativa que la CAF cambié su posición y se mantenga a Caracas como la sede de esta organización.
“Venezuela ha sido víctima de intolerancia política y desde el punto de vista económico es como si uno va a una carrera y le amarran los pies y las manos, es una competencia desleal lo que le ocurrido y sin duda ha tenido un impacto en esta organización que establece mecanismos de financiamiento para el desarrollo”, dijo Rodríguez. “Venezuela es país sede la CAF, según su acuerdo constitutivo; y aquí encontrará un gran grupo de trabajo que ha permitido el desarrollo de proyectos para mejorar la calidad de vida de nuestros ciudadanos y de nuestros pueblos”, agregó.