Parque automotor venezolano frenó crecimiento en 32,30% por deterioro de unidades

“Nuestro parque automotor tenía una tendencia de crecimiento para que este momento su volumen fuera de 6 millones 500.000 unidades; sin embargo del 2008, para acá ha dejado de crecer y actualmente hay 4 millones 400.000 unidades; es decir, 2 millones 100.000 unidades menos de las proyectadas, 32, 30 en términos porcentuales”, señaló el ingeniero Eduardo Páez Pumar,  miembro de la Academia Nacional de la Ingeniería y el Hábitat, quien agrega que esto debe al envejecimiento de las unidades y la falta de repuestos producto de la crisis política y social del país que ha ocasionado que las mismas se hayan ido desincorporando.
Añadió el académico en una entrevista concedida a Petroguía en el marco del Foro Impacto de la condición de vialidad en la economía y vida nacional, organizado por dicha academia, detalló que de las 4 millones 400.00 unidades que tiene el parque automotor venezolano actualmente, el 73% son vehículos particulares y el transporte público es apenas del 2%. 
Explica que esta cifra se debe a que durante 2017 y 2018 se desincorporaron 3.500 autobuses de los 7.000 que llegaron al país a través del fondo chino porque esta marca no existir en el país y su introducción no vino acompañada de repuestos, ni de manuales en español o inglés, ni de técnicos entrenados para su reparación o mantenimiento. A su vez, la falta de cauchos baterías y repuestos también afectó a las unidades privadas de transporte público.  Todo esto nos ha llevado, explica, a la condición crítica que tenemos hoy en día donde el transporte público se está haciendo con las llamadas “perreras” que no son otra cosa que pickup o camiones con una pequeña adaptación para que la gente se traslade allí a la intemperie con un alto riesgo y con pérdidas de vidas.
Por otro lado, el académico señaló que el ensamblaje de vehículos de producción nacional y de vehículos importados pasó de 500.000 unidades vendidas en el 2007 a 1.500 unidades en el 2016 y se desconoce la cifra del 2017, pero asegura que es aún menor.

Eficiencia energética

“Si se analiza a su vez el parque automotor de transporte público, más del 70% son minibuses y el porcentaje de autobuses es muy bajo, condición que no existe en países desarrollados o en vías de desarrollo donde las principales arterias viales de la ciudad y las comunicaciones interurbanas se hacen con autobuses de 54 puestos, debido a que dos minibuses consumirían mucho más combustible y lo harían antieconómico”, señaló.
Aclaró Páez Pumar que otra de las desviaciones que hemos tenido en Venezuela, pero esta vez producto de los subsidios al combustible, es que el dueño de un vehículo que pudiera funcionar perfectamente con gasolina de 91 octanos prefiere llenar su tanque con la de 95 octanos debido a que cuesta casi lo mismo y eso trae como consecuencia que consumimos un monto excesivo de gasolina de 95 sin necesidad.
Señaló Páez Pumar que cuando la gasolina sea vendida a precios internacionales sería factible retomar el Programa de Gas Natural para vehículos que se trató de realizar hace varios años en el país pero fracasó porque el bajo precio de la gasolina no justificaba el uso del gas y además porque dejaron de traer gas a las gasolineras. Finalmente, propuso aumentar el número de vehículos privados que funcionan a gasoil como hay en otros países, pues considera que eso permitiría tener suficiente gasolina para exportar y generar divisas al país.